El marchante

Al entrar al pueblo de La Esperanza a la izquierda está el guachinche El Marchante . Como artista que soy no me faltó la alegría de encontrar marchante de carne 🥩 y contubernio. Entullo y vino del país .

Vine solo como mi carrera empezó y como continuo ahora en mi bella Yamaha XSR 125 amarilla. No quise subir al Teide hoy y decidí aguantarme en un local próximo por descubrir. Quién quiera que coma. Quién quiera arte que la pague. El arte no es cosa de broma aunque a veces se mezcle con el humor o la narrativas más variopintas.

Hay que comer.

Los artistas parecemos que tenemos que hacer las cosas por amor al arte. No se nos valora y no se nos da valor.

Hoy es día de carrera de la mujer. Unas compañeras se sentaron a pedir una cuarta al lado.

Me encanta las camisas rosas la del Tete y otras.

Padecer la perdida de seres queridos a causa del cáncer de mama me ha hecho muy sensible a cualquier campaña en su favor. Si antes me parecía fundamental la defensa la mujer y lo femenino ahora me parece un absurdo retrógrado y fascista lo contrario.

Ya no hay excusas o femenino o no será.

Carta generosa.

Hoy me pedí una cuarta de vino, una botella de agua, medio escaldón y secreto y papas.

Uno de mis momentos de gloria, estos ratitos a la sombra, fresquito de la esperanza y buen vino. 

Yo tengo tienda online: store.juanjosevalencia.net pero no galería ni marchante en estos momentos.

No depender de nadie te da cierta autonomía de pensamiento pero lo paso mal sin sala disponible y trabajando a mansalva en el taller sin objetivo de exposición posible en el horizonte.

Yo sigo con mi Payo Pekín y mi estudio sin dudar pero apurado pagando con mi humilde pensión todo. Si no fuera por la ayuda familiar no podría hacer nada. Agradecido que les estoy.

Pues sí. Quizás esos sean mis marchantes. Mi pañuelo de lágrimas y mis consejeros. No descarto otros trabajos creativos, de hecho, este año trabajé para la empresa joyera Tous en una campaña de una serie de joyas.

También trabajé en la Coca Cola y muchas ETT han pasado por mi vida.

Podría decir que soy un chico Coca Cola pero una prominente tripa que intento bajar me lo impide.

El escaldón pequeño es ideal para el fresquito. Está muy bien y completo.

El trabajo profesional está muy complicado en Canarias. Mientras más intentan profesionalizar el sector más impostores hay y más fraudes.

Miramientos y descrédito. Posturas impostadas y tesis forzadas.

Secreto y mojos exquisito.

Por la dieta no pedí postre. Muy recomendable y en proximidad. Les recomiendo hoy buscarse marchante.